
La edición 2025 del Hack Summit, celebrada en Lausana, ha reunido a la escena europea del Climate Deep Tech: fundadores, inversores y tecnólogos que trabajan en la intersección entre hardware, ciencia y sostenibilidad. Más de 850 asistentes, -entre ellos 250 inversores, 250 fundadores- además de una treintena de startups expositoras, han explorado durante dos jornadas los últimos avances y tendencias en áreas como energía, materiales, plástico, carbono, combustibles sostenibles y agrifoodtech. El evento ha acogido además el FoodTech World Cup, en el que la startup argentina Future Biome, se alzó con el premio entre 10 finalistas. Entre los temas clave destacados: la creciente importancia de la innovación colaborativa entre corporates y startups; el impacto transversal de la inteligencia artificial; el reto del crecimiento y el escalado en un contexto financiero volátil, y -a pesar de ello y los vientos de cara actuales- y un cierto optimismo respecto al apoyo a la innovación en climate tech.
Innovación colaborativa
En las conversaciones sobre innovación abierta, la idea de colaboración suena cada vez menos menos a tendencia y más a condición necesaria. En sectores como el alimentario, donde el cambio rara vez es rápido, la alianza entre startups y grandes corporaciones se perfila como una de las pocas vías viables para escalar soluciones realmente transformadoras. Más allá de la inversión, lo que se remarcó fue la importancia de un compromiso sostenido, de construir juntos con objetivos comunes y desde una actitud de cooperación real. En este contexto, la co-generación se plantea como un modelo útil: programas que no solo detectan y agrupan startups según retos tecnológicos concretos, sino que también crean el marco para una colaboración efectiva con la industria. Un enfoque más estructurado para reducir la distancia —a veces considerable— entre la innovación y su implementación.

Más allá del valle de la muerte
Superar el llamado “valle de la muerte” es solo el primer hito. Para muchas startups, el verdadero desafío llega después, a la hora de desbloquear el crecimiento. En especial para aquellas que necesitan construir activos reales o capacidad de manufactura, el capital requerido va mucho más allá de la inversión en equity (se necesita “capital serio” del que “se deja la piel -skin in the game-” además del dinero). Navegar entre las distintas opciones de financiación —pública y privada— se vuelve entonces fundamental. La clave está en estructurar una combinación coherente de subvenciones, capital riesgo, deuda, financiación de proyectos, acuerdos de precompra y otras fórmulas disponibles. La estabilidad, en este contexto, no se alcanza confiando en una única vía, sino manteniendo un equilibrio consciente entre múltiples fuentes.
Desbloquear el capital
A pesar del contexto complejo, se respira cierto optimismo entre quienes siguen apostando por la innovación climática, en la que se incluye la industria agri-foodtech. Todavía encontramos inversores institucionales, family offices y fondos catalíticos —dispuestos a asumir más riesgo o aceptar retornos más bajos a cambio de impacto— (abundantes, según se respiraba en Hack Summit) que mantien su apoyo o al menos, la curiosidad. Muchos ven en estas inversiones una alternativa sólida a largo plazo. La combinación de estos distintos perfiles, trabajando en tándem y con herramientas financieras diversas, parece una de las claves para seguir desbloqueando capital en un sector que aún tiene mucho por construir.
FoodTech World Cup
La edición 2025 de la FoodTech World Cup puso el foco en startups que están reformulando la relación entre alimentación y salud. Bajo el paraguas de “Food for Health”, las diez finalistas abordaron áreas tan diversas como la gestión del peso, los snacks funcionales, la longevidad, la salud intestinal, la nutrición personalizada, la inmunidad o los llamados mood foods. Una muestra clara de cómo la innovación alimentaria se adentra cada vez más en el terreno de la prevención y el bienestar personalizado.

El premio principal fue para Future Biome, una startup argentina centrada en el desarrollo de soluciones de nueva generación para la salud intestinal. Su propuesta: aprovechar las capacidades de ciertos hongos para crear prebióticos de precisión, más eficaces, con menor dosis y menos efectos secundarios que los actuales ingredientes disponibles en el mercado, como la inulina. Su enfoque apunta a transformar el mercado de los prebióticos con una solución científicamente validada, accesible y escalable. Entre las finalistas, destacamos propuestas como la sueca Ironic Biotech, que desarrolla una proteína vegetal con hierro hemo, similar al presente en la carne, pero de origen no animal; y Affecto by Solutions, que trabaja con moléculas naturales capaces de inducir pérdida de peso significativa, en línea con la tendencia marcada por los medicamentos antagonistas al GLP-1.